¡No hay ola de calor que nos pare! Ayer volvimos a Alburquerque a visitar a la Asociación Juvenil Sambrona para reflexionar, junto a Jose y Montse, sobre el impacto ambiental de la asociación. En esta sesión nos centramos en analizar los impactos en la movilidad, el consumo, la alimentación, los residuos, el agua, la electricidad y la climatización del proyecto de Microresidencias Artísticas que desarrollan desde Sambrona.
La sesión comenzó con la clarificación de algunos conceptos clave en relación a la medición del impacto ambiental, como son la Huella de Carbono, la Huella Hídrica y la Huella ecológica. Sobre todo incidimos en la importancia ser capaces de analizar más allá del impacto del consumo, para empezar a tener en cuenta el impacto de los procesos de producción y la gestión de los diferentes residuos que generamos.
Teniendo esto en cuenta, comenzamos a analizar las prácticas de Sambrona para identificar impactos negativos, positivos y neutros. Tras el análisis pudimos concluir que:
– La movilidad, el consumo, los residuos son los principales retos de reducción de impacto de la asociación
– En agua y climatización, con pequeños cambios se podría alcanzar una gestión sostenible
– La alimentación durante las microresidencias se plantea de la manera más sostenible posible.
Durante la sesión surgieron algunas reflexiones interesantes. Es imprescindible ponernos las gafas verdes de la sostenibilidad para ser capaces de diferenciar entre necesidades reales y necesidades creadas ¿llevamos a cabo acciones que podrían ser surprimidas/sustituidas sin que afectase al resultado de la actividad/ el proyecto? ¿Podríamos realizar las mismas actividades sin necesidad de utilizar electricidad? Debemos trabajar para transversalizar la mirada ambiental, al igual que venimos haciendo con la visión de género, por ejemplo.
No obstante, debemos tener claro que todas las actividades que realizamos las personas generan un impacto sobre el planeta, la clave está en reducirlo al máximo posible e intentar compensarlo. La principal medida de compensación, y la más efectiva, es la plantación de árboles. Es positivo que comencemos a incorporar estas medidas dentro de la ejecución de nuestros proyectos. ¿Hay mejor manera de finalizar un proyecto que sembrando futuro?